Cuando llegas a la torre del Cap d’Or, por los senderos que conducen a ella, es casi imposible no pensar en los piratas y corsarios que asolaban este litoral alicantino. Todo este acantilado de la Marina Alta incorpora cuevas y calas. Elementos que, aunque hoy son un gran atractivo para el turismo, hace siglos servían de refugio y desembarco para amigos del pillaje y el contrabando.
Historia de la Torre de vigia Cap d’Or
La torre vigia Cap d’Or fue la primera construcción de vigilancia construida en esta parte de la costa, pues data del siglo XVI. Fue edificada por indicación del arquitecto Antonelli que, en un informe de 1563, propuso crear una línea de torres de vigilancia en este litoral. El motivo era la elevada actividad de los piratas que impedía que se consolidara en núcleos de población.
El objetivo era garantizar la seguridad de la zona y promover los asentamientos, pues, como constata el historiador Cavanilles, no existían pueblos todavía en 1779. Aun así, incluso construyendo el castillo en 1742 para reforzar las defensas, la zona siguió casi deshabitada. Solo a partir de 1830, con la conquista francesa de Argel, empezaron a aparecer en Teulada algunos núcleos habitados que irían arraigando; entre ellos, Moraira.
Características constructivas y funcionamiento de la Torre del Cap d’Or
La torre Cap d’Or es como un cono truncado. Sus paredes parten de una base circular, con un perímetro de 26 metros, y ascienden, inclinadas, unos 11 metros, hasta la zona plana superior, la de señales y vigía.
Cuando la observas bien, ves que es toda maciza hasta más de la mitad de su altura, lo que le permitía resistir cualquier asedio. Solo se podía acceder desde el exterior a una sala habitable, por medio de una escala de cuerda. Desde allí, hasta la zona de vigilancia en la terraza, mediante una escalera de madera. De esta manera, los vigías podían llevar a cabo su función sin riesgo a ser reducidos por los piratas.
La torre del Cap d’Or de Moraira se comunicaba directamente con otras dos torres, Ifach y Granadella. Un pequeño retén de vigilancia se encargaba de mandar señal a estas dos atalayas en caso de detectar amenazas. Lo hacían prendiendo fuego en su azotea. Así era como se ponía en aviso a los pueblos del interior, verdadero objetivo del pillaje de los corsarios argelinos.
Ubicación y vistas panorámicas desde el Cap D’Or
El Cap d’Or es un promontorio rocoso sobre el litoral de Moraira. Una punta que sobresale de la tierra y se adentra en el mar. En su parte más alta, a más de 160 metros, se construyó la torre del Cap d Or de Moraira, justo al filo de los acantilados.
Las vistas son espectaculares en el mirador y abarcan todo el litoral, desde Punta Estrella, al sur, hasta la isla del Descubridor, al norte, sobre todo, si te ayudas de unos buenos prismáticos. Incluso en días muy diáfanos, se puede divisar la isla de Ibiza.
Aunque no podrás acceder a lo alto de la torre, te puedes asomar a la bahía de Moraira desde la planicie. Es muy posible que los dos cañones que se encontraron hace 40 años en la construcción se empleasen en la defensa de este puerto.
En el mismo alto, y a escasos pasos, podemos encontrar los restos de un poblado íbero. También, un aljibe de agua que fue construido para este asentamiento y, después, utilizado para el abastecimiento de los hombres del retén de la torre.
El paseo hasta su ubicación es muy agradable y brinda excelentes panorámicas. En el camino, pasarás por la Cova de la Cendra, uno de los más importantes yacimientos del paleolítico existentes en la zona. Muy cerca de ella encontrarás otra cueva, la Cova de les Rates Penades.
Senderismo por la Torre del Cap d'Or
A partir del primer minuto, tomando el camino de la playa desde el Portet, en Moraira, vas a disfrutar del trayecto. A lo largo del Sendero SL-CV 51, encontrarás numerosos bancos de piedra o de madera. Además de servirte para descansar, están previstos para funcionar a modo de pequeños miradores desde donde recrear la vista o tomar fotos. Durante el recorrido, vas a poder contemplar todos los acantilados entre Benitatxell y Moraira.
Ya en el promontorio comienzas a sentir toda la historia invadiéndote. Tu vista se centra, de inmediato, en la imponente torre y pasa directa al mar, como oteando las velas en el horizonte. Es entonces cuando imaginas, en la terraza de la torre, a los vigías encendiendo una hoguera o aprestándose a apuntar los cañones hacia la entrada de la bahía.
Por qué visitar Moraira y conocer su historia
La torre del Cap d’Or Moraira es uno de esos lugares con magia, capaz de reunir naturaleza, paisaje, historia y arquitectura para crear una atmósfera especial. No dudes en visitarlo durante tus vacaciones en Moraira. Planifica ahora tu estancia y encuentra aquí tu alojamiento ideal.